Fruto de un trabajo constante, la Universidad de los Andes pasa en cinco años de la 8ª posición a la 4ª entre las universidades chilenas.

La Universidad de los Andes pasa a ocupar la 4ª posición entre las mejores universidades chilenas según el Ranking de Universidades de América Latina 2024 publicado por Times Higher Education, siendo la más joven, 35 años, del grupo de las 4 primeras: Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidad de Chile y Universidad de Santiago de Chile.

Fruto de un trabajo constante, la Universidad de los Andes pasa en cinco años de la 8ª posición a la 4ª entre las universidades chilenas, según cifras de este mismo estudio, lo que le ha permitido ocupar el puesto 1º entre las Universidades privadas de Chile en 2024.

La Universidad mejoró significativamente su posición en el Ranking THE Latam en el último año a nivel regional, subiendo 9 puestos de entre las universidades latinoamericanas, pasando a la posición 32 en 2024, consolidándose dentro del 15% mejor rankeada a nivel Latinoamericano, y convirtiéndose en la 4ta universidad de entre las chilenas.

El avance de la Universidad en el último año se atribuye principalmente a mejoras en las dimensiones de “enseñanza” y “entorno de la investigación”, en los que destacan su calidad académica y su impacto en investigación. El ranking evalúa dimensiones clave como “enseñanza”, “entorno de la investigación”, “calidad de la investigación”, “perspectiva internacional” y “vinculación con la industria”.

Prioridades para la Universidad

José Antonio Guzmán, Rector de la Universidad de los Andes afirmaba desde el Latin America Data Forum, en el lanzamiento del ranking universitario Latinoamericano 2024 de Times Higher Education (THE) que se presentó en la Universidad Austral de Argentina, “que existen muchas áreas de alineación entre las prioridades de la Universidad de los Andes y los indicadores del THE Ranking Latam, particularmente en las dimensiones de “Enseñanza”, “Investigación” y “Citas”.

Aunque afirma que existen otras prioridades para la universidad “como el enfoque educativo que busca el desarrollo integral de la persona, la retención de estudiantes, las becas y el apoyo financiero para estudiantes de bajos ingresos, la experiencia estudiantil, las relaciones con ex alumnos, las donaciones recibidas, la integración de tecnologías innovadoras, la infraestructura y el compromiso con la sociedad”.

Para el Rector, “en términos generales, todos los indicadores establecidos en la dimensión de enseñanza son prioridad para la Universidad y están contenidos en la Planificación Estratégica Institucional”.

En el foco Educación de Calidad de la PEI, “se incluyen iniciativas para la formación integral de los estudiantes, el desarrollo de habilidades transversales, el fortalecimiento del cuerpo docente y la atracción de buenos estudiantes independiente de su situación socioeconómica, las que tienen una incidencia directa en las mediciones de esta dimensión del ranking”, afirma.

Por otra parte, la iniciativa “Crear Nuevos Programas de Doctorado” del foco Búsqueda de la Verdad, “posee una incidencia directa en las ratios asociadas a los doctorados otorgados”.

El foco Sustentabilidad “considera iniciativas que tienen como objetivo aumentar la capacidad de generar ingresos a través de diversas actividades académicas, de postulación a fondos de investigación y de transferencia de conocimiento hacia la industria. Estas inciden en el indicador ingresos institucionales contenidos en la dimensión “Enseñanza” del ranking”.

La dimensión Investigación y Citaciones “se enlaza con el foco Búsqueda de la Verdad que prioriza fortalecer la Investigación Focalizada, Interdisciplinaria y Asociativa, aumentando la productividad e impacto académico”.

La PEI enfatiza la investigación interdisciplinaria y asociativa, “lo que tiene un impacto directo en el número de citaciones, un indicador clave del ranking. La promoción de proyectos colaborativos y publicaciones internacionales fomenta un mayor impacto académico, lo que mejora la posición de la Universidad en este pilar”.

Añade José Antonio Guzmán que hay elementos estratégicos fundamentales para la Universidad de los Andes que no se incluyen en el estudio como es la Formación Integral de Estudiantes: “ya que la dimensión valórica y la formación humanista son elementos distintivos que enriquecen la experiencia formativa y tienen un impacto significativo en el desarrollo personal de los estudiantes. Esta prioridad responde a la misión de la Universidad de formar personas íntegras y comprometidas con la sociedad, un enfoque que, es central para el cumplimiento de su misión institucional y aporte a la comunidad”.

La retención de Estudiantes y el desempeño Académico, son aspectos de gran relevancia para la Universidad de los Andes. “Estos indicadores reflejan el compromiso de la Universidad con el éxito académico y el bienestar integral de sus estudiantes, que se relacionan directamente con el valor institucional de aprecio por la dignidad humana. La Universidad se esfuerza por acompañar a cada estudiante en su trayectoria académica a través de programas como el asesoramiento universitario, asegurando que reciban el apoyo necesario para progresar de manera satisfactoria y finalizar sus estudios en el tiempo previsto”.

Afirma que es importante la posibilidad de otorgar becas económicas a estudiantes que tienen el potencial académico para estudiar en la Universidad, pero que carecen de los recursos necesarios, “es fundamental para la Universidad y responde a su compromiso con la sociedad”.

“La experiencia del estudiante, tanto de pregrado como de posgrado, es un aspecto esencial para la Universidad de los Andes, ya que ofrecer una experiencia enriquecedora significa crear un entorno de aprendizaje que fomente no solo la excelencia académica, sino que también el crecimiento integral, el sentido de pertenencia y el apoyo en cada etapa de la vida universitaria”.

La relación con los egresados, “el fortalecimiento de su sentido de pertenencia y el apoyo en su inserción laboral son aspectos relevantes para la Universidad de los Andes, que están incorporados también en su plan estratégico”.

Avanzar en modelos académicos innovadores que integren tecnologías como la realidad virtual (RV), la inteligencia artificial (IA) y metodologías de enseñanza avanzada, señala “es de gran importancia, ya que estos enfoques transforman la experiencia educativa y preparan a los estudiantes para enfrentar un entorno profesional cada vez más digital y complejo”.

Las donaciones recibidas representan mucho más que un recurso económico; “son un respaldo al compromiso con la excelencia académica, la inclusión y la proyección de un modelo educativo. Gracias a esto, la Universidad puede implementar iniciativas que van desde el apoyo a estudiantes talentosos de bajos recursos hasta el desarrollo de nueva infraestructura, asegurando un crecimiento sostenible y fiel a misión”.

Contar con una buena infraestructura también es esencial. “Permite la implementación de laboratorios avanzados, bibliotecas bien equipadas, espacios de estudio colaborativo y tecnología de vanguardia, elementos que impactan en la calidad de la enseñanza y la investigación. Además, un campus bien diseñado y mantenido fortalece el sentido de pertenencia y contribuye a crear una comunidad universitaria cohesionada, reflejando el compromiso de la Universidad con el crecimiento y bienestar de sus miembros”.

Afirma el Rector que contribuir al debate público mediante la generación de evidencia que apoye el desarrollo de políticas públicas es una prioridad para la Universidad de los Andes, “ya que este compromiso fortalece su rol social y le permite impactar de manera positiva en el bienestar de la sociedad. Al participar activamente en la discusión de temas nacionales, la Universidad puede aportar investigaciones, análisis y propuestas que guíen la creación de políticas informadas y efectivas en áreas clave como la salud, la educación y el desarrollo económico. Esta labor es esencial para la universidad ya que responde a su misión de contribuir al bien común y de poner su conocimiento al servicio de la comunidad. Refleja el compromiso de la Universidad con el progreso del país y el valor que otorga a la investigación aplicada, aspectos que, aunque no son reconocidos por los rankings, son prioritarios en su visión institucional y en su responsabilidad con la sociedad”.