Cristián (Ale) Pantoja (ICOM’14) y su experiencia laboral en Deloitte Canadá
Se cambió de país, manteniendo su cargo en la misma compañía. Tuvo que enfrentar a un equipo de trabajo más numeroso y totalmente desconocido, y un mercado de mayor tamaño y donde la innovación es central. Lo anterior, además de todos los ajustes personales y profesionales que ha exigido el COVID-19.
Por su trabajo en la empresa de servicios profesionales Deloitte, Cristián (Ale) Pantoja (ICOM’14) se trasladó hace cuatro meses a Toronto (Canadá), donde mantuvo su cargo de Consultor Senior en el área de Customer & Applied Design y permanecerá por tiempo indefinido.
Su área desarrolla productos, servicios y experiencias centradas en las necesidades y motivaciones de las personas o customers (usando metodologías como Human Centred Design). Puntualmente, Cristián desarrolla proyectos para empresas de distintas industrias, lo cual implica entrevistar clientes, desarrollar insights y, finalmente, idear propuestas que mejoren sus negocios.
Una de las cosas que más le costó del cambio fue no conocer al equipo y ser un completo desconocido para éste. “Pasé de trabajar con 12 personas a un grupo de 300”, explica. “Venía de una posición muy cómoda en Chile, donde todos me conocían y sabían cuál era mi valor agregado. Acá siento que debo probar que merezco el cargo, pero me ha ido bien los primeros meses”. Al anterior desafío, se suma además que el mercado canadiense es más grande y los proyectos, más innovadores y de mayor envergadura.
Egresaste en 2014 e inmediatamente entraste a Deloitte Chile. ¿Cómo se dio esta oportunidad?
Cuando empecé a buscar trabajo estaba enfocado en temas numéricos, tipo finanzas e inversiones. Sin embargo, no tuve tantas entrevistas en esas áreas, así que algunas personas me comentaron que postulara a consultoras. Encontré interesante el nicho y finalmente quedé en dos de las Big Four. Me decidí por Deloitte porque tenía más mercado en Chile.
Cuando estaba en la UANDES, nunca supe que existía la consultoría como opción. Me dio mucho gusto cuando, a mediados de 2019, recibí una invitación del profesor Juan Nagel para ir a hablar sobre mi trabajo a los alumnos del Club de Consultoría, y vi que ahora se tiene mucho más en mente. Encuentro demasiado valorable que se junten a conversar, hacer casos de negocios y generen redes de contacto.
¿Cuantó pesó en tu incorporación a Deloitte el hecho de haber sido parte de team CFA UANDES en el CFA Challenge y, al mismo tiempo, ayudante en el Laboratorio de Inversiones?
Influyó totalmente. El mercado laboral, sobre todo para las consultoras, es muy competitivo y cualquier elemento diferenciador suma puntos.
Es importante que durante los años de universidad los alumnos tengan la oportunidad y se enfoquen en desarrollar habilidades más allá de los ramos. Salen muchos Ingenieros Comerciales de buenas universidades todos los años y es la única forma de diferenciarse al entrar al mercado laboral.
¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo y de la empresa en que trabajas?
Que realmente ponemos las necesidades de los consumidores en el centro de la estrategia. Entendemos que, muchas veces, la primera línea de gerencia de una compañía puede estar muy alejada del consumidor final y, entonces, actuamos como un catalizador para mostrar la realidad de los consumidores. A veces, esto es muy difícil, pero bien hecho genera reales impactos en la vida de las personas. Lo que más me gusta de Deloitte es que es una empresa gigante (315.000 empleados a nivel mundial) y siempre encuentras profesionales con intereses compartidos. Tanto en Chile como en Canadá, he podido participar en diversas iniciativas más allá de mi rol, en temas de diversidad, inclusión y cambio climático.
¿Cuáles han sido tus aprendizajes laborales y personales en Deloitte?
Han sido cinco años de aprendizaje, es difícil acordarme de todo. Como consejo a los alumnos y recién egresados que están por entrar al mercado laboral, puedo decirles que:
- Sean ustedes mismos en el trabajo: está probado que los ambientes laborales donde las personas sienten que pueden ser más auténticas favorecen la creatividad y la productividad. Y nuestro trabajo es encontrar soluciones creativas a los problemas de negocios que se nos presentan.
- No tengan miedo a hacer preguntas: es mucho mejor ir construyendo en conjunto en el camino, que pasarse una semana haciendo algo por tu cuenta y que no se ajusta a las expectativas.
- Aprendan a manejar las expectativas de sus jefes o superiores: si dices que vas a tener algo listo en uno o dos días, siempre considera tiempo para imprevistos. Si te das cuenta que no vas a cumplir un deadline, avisa oportunamente.
¿Cómo han enfrentado el COVID-19 en Deloitte Canadá? ¿Cuánto los ha golpeado y de qué manera están trabajando con los clientes?
Hemos tenido que adaptarnos, pero desde el principio nos posicionamos bien para hacer frente a la pandemia. Nuestro trabajo se puede realizar desde la casa y teníamos totalmente implementado el home office.
En nuestros clientes hemos visto cambio en sus prioridades, las empresas se han adaptando a servir a sus consumidores de mejor forma durante estos tiempos, entonces hemos visto un aumento en proyectos relacionados con e-commerce y experiencia online.
¿Cómo fue tu paso por la UANDES como estudiante de Ingeniería Comercial?
Demasiado bueno, lo pase muy bien, hice amigos de por vida, fui ayudante de varios ramos, me fui de intercambio, participé en CFA Challenge, armé el Laboratorio de Inversiones con el profesor Mario Tessada y apoyé en varios temas en la Facultad. Fue una experiencia increíble y ha tenido un impacto increíblemente positivo en mi carrera profesional, por eso les digo a los alumnos que siempre busquen hacer más cosas, estar más involucrados y desarrollarse en los temas que les interesan.
¿Qué caracteriza a los ingenieros comerciales UANDES?
Nos distinguimos por la facilidad en establecer relaciones interpersonales con los equipos donde trabajamos y por nuestro compromiso a siempre seguir aprendiendo.