En el marco del 36° aniversario de nuestra casa de estudios, el vicerrector Académico, José Miguel Simian, hizo entrega del “Premio Excelencia Docente”, el que constituye el máximo reconocimiento a la labor docente en la Universidad de los Andes y reconoce a aquellos académicos que promueven el conocimiento y los valores universitarios, son efectivos e innovadores en sus metodologías de enseñanza y tienen un alto impacto en el aprendizaje de sus alumnos.

Los profesores reconocidos fueron nominados por sus respectivas unidades académicas, en virtud de su trayectoria, compromiso y excelencia en el ejercicio de la docencia. El jurado de selección estuvo compuesto por autoridades académicas, un representante de la Federación de Estudiantes, y los profesores premiados en la edición anterior (el premio se entrega año por medio).

En el área de las Humanidades la distinción recayó sobre la profesora Claudia Maggi Ferretti (PSI´05) de la Facultad de Ciencias Sociales.

La académica se integró a la Universidad de los Andes en 2011 como Profesora Asociada Extraordinaria, y desde entonces ha estado a cargo de asignaturas centradas en la comprensión psicológica de la familia, las relaciones familiares y las técnicas de intervención desde la terapia sistémica. Su docencia se caracteriza por una profunda vocación, innovación metodológica y cercanía con sus estudiantes. Ha sido pionera en el uso de metodologías activas, como el análisis de canciones populares para ilustrar conceptos teóricos, el uso de actores en simulaciones clínicas, y la implementación de experiencias en la Sala Espejo, iniciativa reconocida con el Premio CIMMA 2022, por su impacto en el aprendizaje clínico y colaborativo.

“No cabe duda de que todos mis profesores impactaron e influyeron en mi rol como docente de alguna medida. Durante mi etapa como estudiante en la Universidad de los Andes, creo que ellos no sólo se preocuparon de entregar una sólida formación académica, sino también siento que me entregaron una profunda valoración por el compromiso, la rigurosidad y la vocación docente. Esa experiencia marcó significativamente mi forma de enfrentar hoy la labor académica”, comenta.

Claudia ha sido elegida en múltiples ocasiones como “profesora madrina” por los estudiantes que egresan, reflejo de su cercanía, disponibilidad y compromiso con el bienestar académico y personal de sus alumnos. Su oficina es un espacio de acogida y orientación constante, y sus clases son reconocidas por fomentar el pensamiento crítico, la reflexión ética y el aprendizaje significativo.

En su rol como directora estudiantil de la Escuela de Psicología, ha demostrado liderazgo, sensibilidad y compromiso institucional, siendo reconocida por su gestión y por superar ampliamente las metas asignadas.

“Como profesora, busco poder reflejar el mismo nivel de dedicación y exigencia, promoviendo un ambiente de respeto, responsabilidad y excelencia. Asimismo, valoro especialmente el acompañamiento personalizado que viví como alumna, y por ello busco estar disponible para mis estudiantes, comprender sus necesidades y contribuir activamente a su desarrollo integral, tanto en lo profesional como en lo personal”, explica.