Durante el Acto Académico Aniversario XXXIII se entregó por tercera vez el Premio Asesor Universitario para reconocer el trabajo de todos quienes cumplen esta función.

Las premiadas destacan el trabajo de todos los asesores universitarios, quienes dedican mucho tiempo a escuchar, animar, abrir horizontes a los estudiantes de los primeros años para que asuman de buena forma sus responsabilidades y descubran cómo pueden poner sus talentos al servicio de la sociedad.

La secretaria académica de la Escuela de Administración de Servicios comenta que “me encanta conversar con los estudiantes, estar disponible y ayudarlos en lo que necesiten, sobre todo considerando que por lo general son alumnos de primer año y es cuanto más cerca necesitan la orientación y apoyo de su asesor porque todo es nuevo para ellos”.

La alumni de Administración de Servicios resalta el rol de los profesores, “que estamos para servir a nuestros alumnos, y el asesoramiento es una oportunidad para apoyarlos y ser parte de su proceso de formación académica”.

La profesora de Kinesiología fue destacada por sus alumnos por su dedicación, cercanía y trabajo bien hecho. “Es un reconocimiento a todos los que apostamos por la “humanidad” de la vida universitaria, donde ningún estudiante debe pasar sin ser visto y llamado por su nombre”, resalta Pauline.

Sobre su labor como asesora comenta que “me motiva el acompañar los distintos procesos que viven las/los jóvenes, también el desafío permanente de comprender las realidades nuevas que les afectan, calibrar sus visiones y proyecciones, encontrar las preguntas precisas que les ayuden a cuestionarse y ojalá producir cambio positivo; en particular en nuestra profesión, alimentar su vocación de servicio y su capacidad de conmoverse ante el dolor y la fragilidad”.

La directora de estudios del Instituto de Historia explica que el trato con los estudiantes “es una mezcla de cariño y exigencia, en orden a que generen herramientas propias para enfrentar la realidad que les toca vivir; es decir, hacerse cargo de sus responsabilidades de hoy y del futuro”. Alejandra destaca que “lo mejor de ser asesor universitario es ver cómo los alumnos van madurando como personas y como futuros profesionales”.

Francisco Javier Lavín, Vicerrector de Alumnos y Alumni, destacó durante el Acto Aniversario XXXIII de la Universidad de los Andes la importante labor de los 416 asesores universitarios que con su acompañamiento personalizado contribuyen a la buena experiencia del todo el ciclo del estudiante, lo que aumenta la sostenibilidad del modelo académico de la Universidad. No por nada se dan aquí las mejores tasas de retención y de titulación oportuna del sistema universitario chileno”.