La vida da algunos giros y, en el caso de Diego y Juan Esteban, luego de estudiar una carrera universitaria, descubrieron que Dios los llamaba a servir a todos los hombres y mujeres como sacerdotes.

El p. Diego González egresó de la UANDES y, un tiempo después, comenzó sus estudios en el seminario de la diócesis de Santiago. El p. Juan Esteban descubrió primero su vocación como numerario del Opus Dei, ejerció la medicina en Concepción y luego viajó a Roma donde se preparó para el sacerdocio en la Universidad de la Santa Cruz.

Hace unas semanas ambos recibieron el orden sacerdotalel periodista UANDES fue ordenado por el arzobispo de Santiago, Mons. Celestino Aós, y el médico, por el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado de la Santa Sede.

“Es aquí y ahora donde el Señor nos ha puesto y no hay otro tiempo mejor (…) no podemos jactarnos de que estamos aquí por nuestro mérito ni por nuestro esfuerzo (…) el Señor nos tiene hoy como sacerdotes de Jesucristo sólo porque Él así lo ha querido”, comentó el p. Diego al concluir la ceremonia realizada en el santuario de la Virgen del cerro San Cristóbal.

Un par de días después celebró su primera misa en la Universidad de los Andes.

El p. Juan Esteban recibiendo la ordenación sacerdotal en Roma.

“Nunca pensé que sería numerario y luego sacerdote. Mi vocación floreció luego de un grave accidente que estuvo a punto de dejarme sin caminar”, así comienza a explicar el p. Juan Esteban su vocación. Ahora, como sacerdote, su mayor ilusión es celebrar la Misa y ser instrumento de Dios para transmitir su perdón y misericordia, y “la buena nueva del Evangelio, de que todos somos amados por Cristo”.

El p. Diego González, que recibió el orden sacerdotal junto con otro sacerdote de la diócesis de Santiago, pidió oraciones por los nuevos presbíteros: “tenemos una sola petición, por favor, se los rogamos, se los imploramos, no nos traten como súper hombres, porque no lo somos y nos hacen un flaco favor tratándonos como tales”.