La Dirección de Relaciones Internacionales de la Universidad de los Andes tiene un objetivo: que cada día más alumnos tengan la oportunidad de aumentar sus capacidades interculturales, conocer otras culturas, ampliar sus horizontes y contribuir al mundo.

Es por eso que, en 2015, en conjunto con la Northeastern University (NU) de Estados Unidos, RRII desarrolló el programa “Dialogues of Civilization” que se realiza todos los años en el mes de mayo (a excepción de 2020 y 2021 por la pandemia), y en el que se realiza el curso “Biomedical Imaging”, en el que en 2018 participó el, en ese entonces, alumno de Ingeniería Civil de la UANDES, Rodrigo Alzola.

Fue así como Rodrigo conoció al profesor Charles DiMarzio de la Northeastern University. “Al final del programa le pregunté a Chuck (como le decimos los amigos) si sería posible realizar un intercambio haciendo investigación en su laboratorio en Boston y su respuesta fue positiva”, cuenta Alzola.

Fue así como el aún estudiante de Ingeniería se instaló en 2019 el estado de Massachussets donde entró en contacto con un ex compañero del programa, Rickard Stureborg, con quien se dedicó a conocer la ciudad. Además, ambos alumnos fueron invitados por el profesor DiMarzio, junto a otro estudiante de la UN, Anuj Gajjar, a escalar con fines recreativos  la montaña Stratton en Vermont.

Fue ahí donde surgió todo. En la cima de la montaña, los tres alumnos de Ingeniería previeron un método para visualizar moléculas de colágeno con fluorescencia. “Estas moléculas miden alrededor de 300 nanómetros (nm), lo cual es bastante pequeño considerando que cada píxel de la cámara del microscopio solo mide 100 nm. En general, para medir algo tan pequeño se usan otras técnicas de microscopía como la de fluorescencia”, cuenta Rodrigo.

Tras dos años desde que empezaron el proyecto en el laboratorio del profesor DiMarzio éste se publicó en la revista científica The Journal of Biomedical Optics.

“Luego de finalizar el programa volví a Chile y defendí mi trabajo de título con éxito. Este proyecto profesionalmente fue muy útil, me dio más experiencia en hablar inglés y, obviamente, tener una publicación es bueno para el Curriculum Vitae, pero destaco mucho más la parte personal, toda la gente que conocí y todo el cariño que me entregaron”, resume Rodrigo.

Revisa aquí la historia del proyecto, contada por la Northeastern University.